Atractivo hotel rural situado en Prado del Rey, una preciosa localidad de casas con tejados de terracota y muros encalados situada entre la Sierra de Grazalema y el Parque Natural de Los Alcornocales. Podrá alojarse en cabañitas de madera de estilo finlandés o bien en las habitaciones dobles situadas en un típico cortijo andaluz. La oferta gastronómica la componen el restaurante de excelente menú variado y el bar con terraza, con vistas a la sierra y a los jardines con piscina. Este es el lugar ideal si lo que busca es relax rodeado de belleza y naturaleza. El pueblo está integrado en la denominada Ruta de los Pueblos Blancos, muy popular entre quienes quieren descubrir el encanto de la arquitectura, la cultura y los paisajes típicos andaluces. Los más activos apreciarán el poder practicar actividades como el piragüismo o la espeleología.Traduction automatique Texte original disponible en
Appealing rural accommodation situated in Prado del Rey, an attractive terracotta-roofed and lime-washed village nestled between Sierra de Grazalema and Los Alcornocales nature reserves. You can choose from the cosy Finnish-style log cabin accommodation or the inviting double rooms located within the tradition Andalusian farmhouse building. The hotel grounds boast a restaurant with a fantastic varied menu, a bar with a terrace where you can admire views of the nearby sierra mountain range and landscaped gardens with an outdoor pool. A perfect spot if your are looking to relax surrounded by beauty and nature. The village itself forms part of the Pueblos Blancos route (whitewashed villages), popular for exploring and discovering the charm of Andalusian architecture, culture and its picturesque scenery. For the more active, the area is great for activities such as walking, canoeing and caving.
Atractivo hotel rural situado en Prado del Rey, una preciosa localidad de casas con tejados de terracota y muros encalados situada entre la Sierra de Grazalema y el Parque Natural de Los Alcornocales. Podrá alojarse en cabañitas de madera de estilo finlandés o bien en las habitaciones dobles situadas en un típico cortijo andaluz. La oferta gastronómica la componen el restaurante de excelente menú variado y el bar con terraza, con vistas a la sierra y a los jardines con piscina. Este es el lugar ideal si lo que busca es relax rodeado de belleza y naturaleza. El pueblo está integrado en la denominada Ruta de los Pueblos Blancos, muy popular entre quienes quieren descubrir el encanto de la arquitectura, la cultura y los paisajes típicos andaluces. Los más activos apreciarán el poder practicar actividades como el piragüismo o la espeleología.